Conferencia del Episcopado manifiesta desacuerdo con agresiones de Barrick Gold

La Conferencia del Episcopado Dominicano (CED), manifestó “su rotundo desacuerdo” por las agresiones sufridas por miembros de la iglesia católica, la comunidad Arroyo Vuelta y otras pertenecientes al distrito municipal de Zambrana, en el municipio de Cotuí, perpetradas por la “empresa minera Barrick Gold, con el apoyo de miembros de la Policía Nacional y el Ejército de la República Dominicana” durante una intervención el miércoles.

Se recuerda que en la manifestación el sacerdote Johnny Durán, de la Iglesia Santo Cura de Ars, en Monseñor Nouel, fue herido en la frente.

“La Iglesia católica, fiel a su misión de defender la vida y la dignidad humana, repudia cualquier acción que violente los derechos fundamentales de las comunidades afectadas y se solidariza con las acciones de nuestro hermano obispo de La Vega, monseñor Carlos Tomás Morel Diplán, también presidente de la Comisión Nacional de Pastoral de Ecología y Medio Ambiente”, dice el comunicado.

Inadmisible

Los obispos consideran  inadmisible que el afán de lucro prime sobre la vida y la tranquilidad de las familias afectadas en la zona

Asimismo, indicaron que además de Durán fue herido otro sacerdote y varias personas de las comunidades pertenecientes a municipio de Cotuí.