Estados Unidos se declaró este jueves «conmocionado y entristecido por el atroz» ataque perpetrado el martes contra civiles durante el intento de reabrir el Hospital de la Universidad Estatal de Haití (HUEH), que costó la vida al menos a dos periodistas y a un agente de policía.
«Condenamos este acto de violencia sin sentido y a los criminales que lo ordenaron. Deploramos las numerosas víctimas: periodistas, policías, personal médico y pacientes», dijo la Embajada estadounidense en un comunicado dado a conocer hoy en Puerto Príncipe.
El comunicado destaca que «esta importante» institución pública -en referencia al HUEH- solía servir a haitianos de todas las clases sociales, y ahora las bandas les han privado de este servicio esencial.
El ataque contra la instalación, que se vio obligada a cerrar en marzo pasado ante la inseguridad en sus alrededores, también causó heridas a otros siete periodistas, cuatro de ellos en situación crítica.